Las causas que producen la perdida de Tu Poder Personal
Las causas de este estado interno es que ya no sentimos la fuerza de nuestro Poder Personal, las energias se han ido perdiendo hasta desvanecer muchas veces a causa de distintos factores que nos han afectado emocionalmente en primer instancia.
Si sientes algo de lo enunciado en la foto es que estas perdiendo tu Poder.
Casi todas las personas pasan por este proceso de debilitación y tristeza en algún momento, o durante toda su vida.
Cuando somos niños-adolescentes nos sentimos poderosos, fuertes, capaces, imaginamos cómo seremos de mayores y llega la vida adulta o la madurez y sentimos y vamos perdiendo ese primer entusiasmo que nos llenaba la vida y el corazon. Y comienza el desgano, el realizar las tareas automaticamente y sin darnos cuenta, perdimos el sabor del entusiasmo, de lo nuevo y la alegria.
Las vivencias personales evolucionan en conjunto con el entorno familiar y laboral, complicandose mas con la situacion social que se suma desde el inconsciente colectivo a debilitar la esencia de cada uno.
¿Por qué perdemos nuestro Poder Personal?
Porque nos desconectamos de nosotros mismos.
Con los años, acumulamos renuncias y heridas en nuestro corazón y nuestra alma; todo nuestro Ser se hace pedazos.
Nuestras emociones y nuestra alma se fragmenta, se quiebran y quedan fuera de lugar flotando adentro de nuestro campo de energia, adentro de nuestra aura.. aportando una desconexion energetica que se manifiesta con falta de coordinacion mental, de accion, de lucidez...
Nuestro Ser está formado por distintas dimensiones (el cuerpo físico, el cuerpo mental, el cuerpo emocional, el cuerpo espiritual, el cuerpo ancestral), pero en muchas ocasiones no conocemos bien nuestra complejidad, no la comprendemos y no entendemos el equilibrio que deben tener entre sì para manifestar la armonia en tu vida diaria.
Vivimos priorizando sólo algunas de nuestras partes, nuestro cuerpo, nos identificamos con nuestro ego y olvidamos a nuestra alma.
Nos hablan de cuidar el cuerpo, la belleza, la imagen, la salud, pero no nos educan para cuidar nuestra mente, nuestra emocionalidad. Menos aún nos enseñan y animan a escuchar nuestro interior sinceramente, a tener en cuenta nuestra esencia...
Y terminamos comunmente escuchando a los pensamientos y a nuestro ego.
Buda dijo:
“Nuestro cuerpo tiene un propósito principal:
cobijar al Alma"
Olvidamos quiénes somos en cada renuncia a decir lo que pensamos, lo que sentimos o lo que deseamos sinceramente.
Olvidamos quiénes somos cada vez que elegimos no tener en cuenta nuestra intuición y nuestra coherencia interna.
Y en cada silencio, cada falsedad, cada juicio que emitimos a otras personas, cuando cedemos nuestro lugar, nos relegamos vamos desconectandonos de nuestra propia naturaleza, de nuestro Ser, y perdemos Poder poco a poco.
Vivimos tan deprisa y tan distraídos que no le damos a
nuestra alma el lugar que necesita para
poder sincronizar con las energias universales
y asi conectarnos con el flujo de energia necesario para fluir
y vivir plenamente el minuto a minuto,
confiando que todo se desenvuelve como debe,
que todo tiene una razon
y no cuestionarnos en los porque,
castigandonos y culpandonos
para poder dejar de dar origen al primer paso de Perdida de Poder Personal.
y no cuestionarnos en los porque,
castigandonos y culpandonos
para poder dejar de dar origen al primer paso de Perdida de Poder Personal.
En cada momento que nos cuestionamos y criticamos y juzgamos a nosotros mismos y a los demas, nos estamos hundiendo en un tornado de energias y emociones negativas. Este tornado crece con cada palabra y pensamiento que emitimos, crece con la intensidad de lo que sentimos y como lo sentimos, crece con las negatividades que oimos, con las que vemos y aun mas con las energias que emiten las personas que nos rodean.
Acumulamos heridas emocionales y psíquicas.
Vivimos en una cultura donde se alimenta la creencia de que se puede evitar el dolor. Intentamos permantemente alejar las emociones que consideremos “negativas” o los momentos dolorosos, negarlos, ocultarlos, ignorarlos, etc.
Y esta creencias nos llevan a ocultar las heridas de nuestro corazón y nuestro espíritu en lugar de atenderlas, y asi las vamos sumando dia a dia... año tras año... decada tras decada.
Creemos y decidimos que es mejor, más fácil o más prudente relegar al olvido nuestros sentimientos, ilusiones, pensamientos y sueños en lugar de escucharlos.
Y construimos máscaras de felicidad, fuerza o seguridad. Pero nuestra propia mentira emocional nos impide sentirnos realmente felices, pues mantiene dentro de nosotros el dolor sin sanar.
Acumulamos recuerdos de tristeza y dolor durante toda la vida sin resolverlos, ignorando que cada emocion tambien acumula energia negativa.
Acumulamos miedos infantiles, heridas de abandono, recuerdos de dolor, pensamientos limitantes que permanecerán en nosotros arraigados en nuestro interior y en nuestro subconsciente a pesar de nuestro esfuerzo de ignorarlos sin aceptar que son una de las causa más importantes de tu debilidad y tu tristeza actual, de tu pérdida de ilusión y Poder Personal.
“No dejes que tus heridas te conviertan en alguien que no eres”
La Liberaciòn BioCuàntica es fundamental para sanar y eliminar las heridas acumuladas y y todos los patrones de pensamiento y reacción asociados a estas heridas. Te libera de estas energias-emociones que acumulas en tu cuerpo energetico, en tu cuerpo almico y además de pone paz dentro de ti, iluminando tu ser en todos los espacios donde se ha realizado la limpieza.
El proceso de sanar te permite construir un nuevo relato de tu historia y de ti mismo mucho más fortalecedor, positivo, sano en todo tu ser, incluyendo tu Esencia Almica
Cada día nos suceden cosas, tomamos decisiones importantes, incluso trascendentes, vivimos momentos que nos conmueven en las relaciones con nuestros seres queridos y en todo lo que nos sucede, no le damos tiempo a nuestro corazón ni a nuestra alma para que puedan comprender, integrar o recuperarse.
El tiempo que ellos necesitan es mucho más lento que nuestro ritmo de vida.
A pesar de las heridas, seguimos hacia delante sin parar, con tanta prisa que no podemos mantener el paso de reparación o sanación necesario y perdemos Poder Personal.
El resultado de esto es que, con los años, vamos dejando partes de nosotros mismos y nuestra alma en antiguas parejas, antiguos amigos, antiguos proyectos y sueños a los que, durante un tiempo amamos sinceramente y de los que nos hemos separado de modo doloroso.
En estas roturas, tu corazon se parte y tu alma también y, una parte de ti, se queda en ese sueño junto a esa persona o en ese lugar.
Poco a poco te vas sintiendo vacío y sin fuerza, estás fragmentado.
Cuando te sientes así es el momento de parar. De mirar hacia atrás y recuperar los tesoros que se perdieron abandonados por el camino. Sin ellos, proseguir es vivir fragmentado y sin fuerza. Es vivir con el alma rota.
“No corras. Ve despacio, que donde tienes que ir es a ti solo.
¡Ve despacio, no corras, que el niño de tu yo, recién nacido eterno, no te puede seguir!”
J.R. Jiménez
Es tan importante parar, observarse e ir despacio…
Entregar el poder a los demás.
Estamos completamente desenfocados.
Algunos lo sabemos, pero no todos cambiamos nuestro punto de atención.
Atendemos la demanda de una gran cantidad de personas que nos dicen cómo debemos dirigir nuestra vida, qué debemos hacer, cómo demos pensar, sentir, trabajar, vestir, comer, etc., de este modo, dejamos en manos de los demás y de nuestro ego la dirección de nuestra vida.
Nos dejamos poseer y convencer.
Olvidamos completamente escucharnos a nosotros mismos en profundidad, renunciamos a escuchar nuestra voz interior, nuestra intuición, y si la oímos muchas veces, renunciamos a hacerle caso. La debilitamos omitiendo lo que nos dice y lo ponemos en juicio de nuestra mente y de las opiniones externas.
No permitimos el silencio y la quietud necesarias para que este diálogo interno sincero se dè.
Tememos encontrar algo dentro de nosotros que no aprueban los demás.
Tenemos miedo a la contradicción interna y a la desaprobación externa.
Y este miedo y el deseo de pertenecer nos hacen renunciar a muchas cosas que elegiríamos distinto: callamos y cambiamos decisiones, opiniones, pensamientos. Renunciamos a momentos, a personas y a decisiones de vida. Algunas pequeñas y algunas de ellas muy grandes.
Convertimos a todo el mundo en nuestro juez, les damos el poder de conducir nuestra vida a través de la necesidad de aprobación.
Este modo de vivir y estar hacia fuera permanentemente, de renunciar a nosotros mismos, sin escuchar qué nos sucede, qué soñamos, qué opinamos… nos debilita.
Tu Poder Personal es tu fuerza Vital,
la seguridad en ti mismo,
la energia que te nutre de tu Ser Interno.. de tu Esencia Misma,
Esa energia que viene del Cosmos y de Gaia cuando estas en Armonia contigo misma,
-Esa es la Energia que Da Fuerzas para Expresarte como Eres
y Crear tu Vida como Desees
Tu Poder Personal habita dentro de ti
Reconòcelo y ve por èl
Si sientes que lo que te he contado en esta nota te está afectando, la Terapia de Liberaciòn BioCuàntica te ayudara a recuperar TU PODER PERSONAL